María Luisa Bombal: Una Huella


Una afirmación queda temblando en la primera página de María Luisa Bombal: una huella (Editorial Cuarto Propio, 2021), que el escritor Waldemar Verdugo dedica a quien trató y conoció durante años: “El valor de toda escritura de la memoria depende de su verdad”.

En las páginas sucesivas, el relato evocador es entretejido con informaciones necesarias, la apreciación aguda acerca de la escritura de María Luisa Bombal y los recuerdos valorativos que de ella entregaran Gabriel García Márquez, Juan Rulfo, Jorge Luis Borges y el cineasta John Huston.

Si existe el peligro de repetición al examinar las obras de autores consagrados—después de todo los recursos de los estudiosos son limitados también–, el libro de Waldemar Verdugo Fuentes queda a salvo de ese obstáculo temible. Comprobado queda su talento de relatar encuentros animados de respuestas y observaciones, las que, junto con la imprescindible información literaria, conforman no un material erudito, sino la apertura a mundos de cálidas proximidades humanas y de pistas interpretativas.

Coloquio interesante y calas analíticas certeras de los cuentos de Juan Rulfo y de María Luisa Bombal acuden en el ensamble que reconstruye la huella de nuestra escritora; regalan al lector posibilidades de incorporarse en el devenir de los capítulos, porque la evocación torna presente y muy humana cada una de las personalidades evocadas.

Destacable la abstención del autor en vistas de equilibrar su presencia en ese tramado de la memoria y del trato tenido con los mentados escritores. Se aproxima y se aleja con prudencia. No es un mero informante de la historia, pero tampoco se afana por quedar en primer plano.

Menos conocidos los episodios y la experiencia de la novelista chilena en Hollywood, cuando escribiera el script (guion) House of Mist (Casa de niebla), y el cineasta John Huston, “el hombre que ´inventó´ a Marilyn Monroe”—dice Verdugo—aporta con algunos recuerdos, aunque no se llevara a cabo la filmación de esa obra.

El vínculo entre los textos de Rulfo y de la autora, así como el realismo mágico quedan bien establecidos en este volumen: “Sobre un montón de piedras y encima de ellas el catafalco de una mujer amortajada que piensa, es que se edificó el Realismo Mágico. Nadie más escribe así, quizás por eso Juan Rulfo como María Luisa Bombal no tienen discípulos: simplemente crearon una Escuela que los estudia y que hoy influye en la literatura universal…”.

¿Qué es este libro? ¿Memoria y entrevistas? Las contiene, pero es mucho más. ¿Ensayo y biografía? Tampoco quedan ausentes de sus páginas, aunque no cubran su más profundo sentido. Este libro de Verdugo es especial, cuya lectura es tan atractiva como interesante. Más propio es decir y celebrar su carácter de huella, siempre y cuando quede a firme la comprobación de que se trata de una huella fundada en la verdad, esa que le entrega valor a la escritura de la memoria.

“La Prensa”, Región del Maule, 27-X-2022.

Juan Antonio Massone